El blog está a punto de llegar a su tercer año, lo que ha supuesto la publicación de más de 500 entradas, de las cuáles, gran parte de ellas están enfocadas en las series españolas que he visto en mis 21 años de vida.
Es cierto que va ser difícil que llegue una serie tan buena para que deje de pensar que "Cuéntame como pasó" es la mejor, pero ha llegado que va a pisar el podio como es la de Merlí. Es cierto que dejó de ser emitida hace un año, pero me percaté de su existencia cuando me digné a bajarme Netflix elnaño nuevo para descubrir series en 2019.
¿Por qué llamó la atención una serie ? Pues porque las series juveniles siempre son un termómetro de la situación de la educación y de la adolescencia española y además, la trama se desarrolló en Cataluña, región que ha abierto un debate nacionalista que está causando crispación en la sociedad española.
Además de tener buena pinta, la historia y los personajes provocaron que más de un espectador estuviera enganchado en todo momento a Netflix. Por ello, cuando se confirmó el fenómeno "Merlí" seguiría adelante en diciembre de 2019 al sacar un spin-off de uno de sus personajes, Pol, me alegré bastante porque esta serie seguiría dando vida a la cultura española. Pero claro, ¿qué ha aportado Merlí a la historia de la televisión española?
1. Un enfoque diferente a la filosofía. Muchos millennials hemos sentido que la filosofía era un carga importante en Bachillerato, pero el personaje de Merlí, interpretado por Francesc Orellá, demostró que aporta muchísimas lecciones de vida, sobre todo para unos adolescentes que están en busca de su camino.
2. El valor de un profesor vocacional y rompedor. Series como "Compañeros" o "Física o Química" demostraron que había muchos profesores que se sentían apasionados por su trabajo e implicados en los problemas del alumnado, pero Merlí se mostró totalmente diferentes.
Se puede bautizar como el "Luis Aragonés" de la enseñanza porque no se cortaba un pelo en decir las cosas a la cara, por ejemplo, cuando mostró su intolerancia a la homofobia o explicó las desventajas que se nos ocultaba en los meses previos a la universidad.
Además, siempre estaba en la vida del alumnado mientras que en "Compañeros" nunca vimos a profes admirados como Alfredo (Francis Lorenzo) o Marisa (Beatriz Carvajal) mostrando tanta dureza y preocupación por partes iguales.
3. El mito del TDAH y de solucionar todo mediante psicólogos. Todo estudiante de magisterio, psicología o pedagogía tiene grabado a fuego que el TDAH (déficit de atención e hiperactividad) es uno de los principales diagnósticos que se dan en el alumnado más conflictivo.
Pau Vilaseca, hermano de Marc (Adrián Grösser) era el ejemplo perfecto del fracaso del sistema educativo que está basado en estar seis horas encerrado en clase, pero antes de reconocer el problema, tratan de calmar a dichos alumnos tratados como "leprosos" a base de pastillas.
4. La apertura que han mostrado a la hora de tratar el sexo. La sexualidad ha sido una de los temas más recurrentes en las tres temporadas que han compuesto la serie "Merlí". Sin duda, nadie ha explicado con mayor precisión las diferentes formas de enfocar el sexo en el relaciones y sobre todo, ver que su práctica genera sensaciones positivas para la persona.
Bueno, estos son los cuatro aspectos que diferencian a Merlí del resto de series y espero que estas nociones mostradas sobre la misma os motiven a verla para comprender mejor la situación de la enseñanza y los adolescentes en la sociedad actual, un saludo.