La falta de acuerdos entre el gobierno español central y de la Generalitat han provocado la irrupción de fanatismos demagógicos para solucionar el problema mediante la violencia.
Un ejemplo perfecto de ello fue el de Quim Torrá, presidente de la Generalitat catalana, manifestó en el Parlament su deseo de conseguir la independencia mediante la "vía eslovena", dejando claro que "los eslovenos lo tuvieron claro, decidieron autodeterminarse y tirar adelante su camino hacia la libertad, con todas las consecuencias hasta conseguirlo".
A simple vista, esta propuesta es una forma valiente de conseguir el propósito de una población, pero es necesario hacerse dos preguntas: ¿tiene claro lo que quiere la inmensa mayoría de la población catalana?
Bueno, según el periódico El Español, el sondeo de SocioMétrica indica que el 51 % de los catalanes desean la independencia del territorio, mientras que el 95 % de los eslovenos (del 90% de la gente que participó) declararon su deseo de desvincularse de Yugoslavia en el referéndum celebrado por el país balcánico el 23 de diciembre de 1990.
En segundo lugar, ¿en que consiste esa vía que es defendida "el camino hacia la libertad"? Ante la negativa del gobierno central yugoslavo y el federal, se prepararon refuerzos procedentes la reserva y que combatieron en la II Guerra Mundial para ejercer una acción represiva ante una posible DUI (Declaración Unilateral de Independencia de Eslovenia) que se produjo el 25 de junio de 2001.
Se produjo una guerra que duró "solamente" diez días porque también tenían otro frente abierto con los croatas que también querían desintegrarse del territorio yugoslavo, pero acabó con la vida de 44 soldados, 18 eslovenos y 12 ciudadanos extranjeros, concretamente periodistas de guerra y camioneros búlgaros que fueron víctimas inocentes en el fragor de la batalla.
A pesar de esta Declaración, los países no reconocieron dicha independencia hasta finales de 1991, entró en la Unión Europea en 2004 y tres años más tarde empezó a integrarse en el euro. De este modo, se pudo demostrar las dificultades que puede sufrir un país independizado si los movimientos políticos se realizan mediante la violencia sin llegar a una solución satisfactoria para todos.
Por lo tanto, es una barbaridad decir que la vía eslovena es el camino hacia la libertad, ya que más de 50 personas muertas en una guerra, aunque "solo" durase diez días debe ser un ejemplo para no caer en los errores del pasado, y no para tomarlo como ejemplo para solucionar un problema de esta envergadura.