Han pasado más de 100 días desde que el Partido Socialista
Obrero Español (PSOE) volviera a tener el poder en España como lo hace un
perdedor, es decir, mediante una moción censura.
Los primeros meses en los que el líder socialista está
disfrutando de su escaño de presidente están siendo más intensos que una pelea
de Dragon Ball y lo peor de todo, es que la imagen de su partido está
empeorando aún.
Parece que la vida de los españoles ha mejorado radicalmente
porque las manifestaciones por las pensiones dignas, por la eliminación del
empleo precario o por una educación pública de calidad han disminuido con
respecto a los años en los que gobernó Mariano Rajoy, pero realmente no es así.
Para empezar, según el periódico "El Mundo", el país sufrió la mayor destrucción de empleo en este mes de agosto desde
2008, año en el que estalló la crisis. Se han destruido 202.966 puestos de
trabajo, por lo que el paro ha ascendido a 47.047 personas, la mayor subida
desde 2011.
En segundo lugar, su prioridad principal ha sido la
exhumación de Franco del “Valle de los caídos". Tuvieron tiempo de hacerlo
en las tres legislaturas de Felipe González y en las dos de Zapatero, pero van
a aprobar la exhumación de Paquito de su tumba nada más volver cuando hay
asuntos de Estado mucho más importantes que remover la mierda del pasado.
Estoy de acuerdo con que es necesario eliminar cualquier
elemento que represente el fascismo en España, sin embargo, pienso que quizás
no es el momento y mira, si se va a hacer esto, por favor, pienso que no hay
que darle el morbo que le están dando, pero claro, la gente perteneciente a la
izquierda radical sufre erecciones dolorosas cuando se hablan de Franco.
Además, declaró en el "Ok diario" que su partido condenaría a
4 años de cárcel y a 15 días sin empleo a quien vote en contra de la aplicación
de la nueva ley relacionada con la memoria histórica.
El señor Sánchez se puede permitir el lujo de hacerlo porque
hace unos días tuvo la poca vergüenza de soltar el siguiente comentario déspota
en una entrevista que le hizo "La Sexta": “soy el presidente del Gobierno y haré
lo que quiera en la Cámara”.
En tercer lugar, he escuchado un millón de veces que el
Partido Popular no ha hecho nada por mejorar nuestra situación económica, y
fijaos que poco dinero había, que según el periódico "20
minutos",Pedro Sánchez ha podido aumentar el número de
ministerios a 17 y ha nombrado 60 altos cargos más que Rajoy en 2011, por no
olvidar que se permitió la licencia de usar un avión en el Ejército
del Aire para ver un concierto de “The Killers”.
Si el Partido Popular hubiera usado fondos públicos para ir a
ver un concierto en un avión del Ejército, el escándalo hubiera sido brutal,
pero si lo hace la izquierda, se mira para otro lado. Lo peor de todo es que le
cogió gusto a coger el Falcom, ya que volvió a usarlo para irse de vacaciones
con su esposa.
Lo peor de todo es que Carmen Calvo, vicepresidenta de Pedro
y ex ministra de cultura en la legislatura de Zapatero, catalogó esta acción
como parte de su agenda cultural. Obviamente, Carmen dijo una mentira como la
copa de un pino porque la agenda del presidente es pública y no apareció por
ningún lado que un concierto en Castellón formara parte de su plan de trabajo.
Carmen Calvo no es el único caso polémico en los
nombramientos que ha hecho Pedro Sánchez. Este hombre ha tenido el honor de
formar parte de la primera legislatura en la que han dimitido dos ministros en
menos de cuatro meses.
Primero fue Máxim Huerta (ex ministro de Cultura y Deportes)
para evitar escándalos en la prensa por sus declaraciones a Hacienda en el
pasado y hace una semana dimitió la ex ministra de Sanidad, Carmen Montón por
irregularidades en su máster.
Lo peor de todo es que Pedro Sánchez ha sido acusado de
plagiar su tesis doctoral y lejos de dimitir como hicieron miembros de su
equipo de gobierno o de encajar las críticas como hizo Cristina Cifuentes o
Carmen Montón, tiene la poca vergüenza de enviar un burofax a "El Mundo", "ABC" y "OK
Diario" para que rectifiquen la noticia sobre él y encima tenga la intención de
emprender acciones legales “en defensa de su honor y la dignidad”.
En definitiva, considero que tenemos a un presidente que
tiene el siguiente lema: “haz lo que te diga, pero no lo que yo haga” y lo peor
de todo es que un sector de la población les sigue votando.
La gente dice que es una desfachatez seguir votando al
Partido Popular, una asociación política que sido protagonista de los
escándalos de corrupción más sonados en España durante el siglo XXI, pero
parece que a más de uno se le olvida que el PSOE es el partido que ha
protagonizado “el caso Fidesa”, “el caso del GAL”,“el caso de los ERE en
Andalucía” y muchos otros.