Ya lo se que mi blog tiene temática variada y no debo hablar siempre de deportes, pero los cambios que ha habido en el banquillo y más aún con el Mundial de fútbol, creo que la destitución repentina de su puesto de seleccionador para ser entrenador del Real Madrid deja que hablar.
Para empezar, debo decir que Julen Lopetegui es un entrenador que tiene nivel para entrenar al Real Madrid porque hizo jugar dar un buen nivel de juego a las categorías inferiores de la selección española, en el Oporto y en la absoluta durante la fase de clasificación, pero claro, si quiere mostrar ese nivel de juego en el club blanco, necesita tiempo y en el Real Madrid, y si en 6 meses no ha podido llevar a cabo su idea, será destituido.
Por un lado, me parece correcto que se quiera ir al Real Madrid porque es una gran oportunidad el hecho de dirigir el club con más Ligas y Copas de Europa, sin embargo, pero sin duda, no es ético que haya negociado a las espaldas de los miembros de la Federación, que estos se hayan enterado cinco minutos antes del anuncio oficial y para colmo, que se anuncie días antes del debut de la selección en la Copa del Mundo.
La principal consecuencia de este hecho ha sido que el actual presidente de la Federación, Luis Rubiales, haya decidido prescindir de él como selección justo antes de que se inicie la Fase Final. Por un lado, hubiera optado por darle continuidad hasta que la selección finalizara su trayectoria en Rusia porque ya se ha establecido una nueva dinámica de grupo entre jugadores y entrenador y es difícil que un técnico se acople a una plantilla en dos días.
Sin embargo, entiendo y apoyo la decisión de Rubiales porque la acción de Julen Lopetegui y de la directiva del Real Madrid ha sido deleznable porque anunciar el fichaje bomba días antes del inicio de un mundial está provocando inestabilidad en el ambiente de la selección y eso es algo que no beneficia y además, comprendo que el máximo mandatario de la Federación no quiera estar con alguien que rompe sus promesas (ser seleccionador hasta 2020) y para colmo, a sus espaldas y cuando no hay margen de maniobra.
Con respecto al sustituto, pues Fernando Hierro es un buen sustituto porque es alguien que conoce bien el ambiente de la selección y su modo de trabajo. Es cierto que tiene poca experiencia, pero lo poco que ha entrenado, no ha hecho mal trabajo, ya que dejó al Oviedo al borde los puestos de play-offs. Es cierto que no ha ganado grandes títulos y que su experiencia es pobre a comparación de otros seleccionadores, pero ha habido entrenadores que sin experiencia han podido hacer cosas grandes como Guardiola, Zidane o Simeone.
Bueno, creo que no tengo nada más que decir, espero que debutemos con buen pie contra Portugal y que Fernando Hierro pueda demostrar que puede ser un buen entrenador. En unos días escribiendo sobre el mundial, un saludo.