Jade me pidió que saliera del local para tranquilizarme. Me dijo que no merecía la pena ir a pegarle, ya que haría el ridículo provocando jaleo en el pub y además, mis padres no me dejarían salir porque mis primas estaban allí y por tanto, la información les podría llegar
Si estaba incómodo porque había gente que no me agradaba, Abel estaba contento. Ainara le dijo que su amiga Marina estaba interesada en él. Por tanto, comenzaron a hablar por Whatsapp y ya empezaron las frases cursis, por ejemplo; "tengo ganas de besarte coquito", "me gustas desde que te vi". Yo le recomendé que antes de irnos al cine el día de Miércoles Santo, quedara con ella a solas y se conociera. En un principio, dudaba si invitarla o no, pero le conseguí convencer.
Ainara estaba contenta porque su mejor amiga tenía novia y yo igual porque vi que Abel llevaba bastante tiempo sin besarse con nadie. En cambio, no todos estaban de acuerdo con las nuevas incorporaciones del grupo. Jade y Luis veían que se alejaban de nosotros, por ejemplo, en "el Zafiro" se alejaron y empezaban a decir cosas al oído mientras nos miraban. Pero sin duda, la más molesta de todas era Carolina porque Ainara (la que era supuestamente su mejor amiga), había pasado de ella para irse con sus amigos y además, le soltaba pullas a Abel porque no le caía bien Marina.
Todos decían que Carolina estaba así porque estaba enamorada de Abel. Pero lo cierto es su primera impresión no le gustó y se demostró cuando Abel y Marina fueron a por él y tras abrir la puerta, le dijo a mi amigo: ¿qué pasa, que vienes a por mí porque te ha dejado plantada la camionera (Marina)?. Al segundo, Marina, partiéndose de risa al haber oído semejante comentario, dijo: "buenas". El asco de Carolina hacia Marina iba a aumentar en la entrada del cine cuando Abel y Marina le pidieron que guardara sus objetos personales para que se besaran mientras pedíamos las palomitas. Ainara y yo nos sorprendidos porque se contradijeron. Dijeron que iban a ir poco a poco y en la segunda quedada hay morreo.
Mientras todos gritamos: "ohhh, que bonito", Javier me dijo: "pues esto no te va a hacer mucha gracia, me ha dicho Alejandro que se quiere venir, ¿seguro que no te molesta?, a lo que le contesté, "no, hombre, intentaré pasar de él". Javier me dijo que vale, que le dirá de quedar en la puerta del cine en cuanto acabe la película. Posteriormente, nos metimos en el cine y vimos "agente contra inteligente". Pasamos muchas risas, aunque otras personas se murieron de asco. Una de ellas fueron mi hermana Alejandra de 13 años en aquel momento. Se vino conmigo y lloró del asco al ver como los protagonistas se metieron en la vagina de un elefante y posteriormente, apareció un elefante metiendo su pedazo de polla por la vagina del elefante en el que se escondieron los hombres.
Dos horas más tardes salimos de la sala y nos sentimos traumatizados, incluyéndome a mi que soy experto en contar historias asquerosas. Les dije que iría a llevar a mi casa a mi hermana y que luego recogería a Jade y por tanto, que nos veíamos todos en el pub "el nereah" para echar unos futbolines, un villar y cantar en el Karaoke.
Mi chica y yo volvimos juntos sin ganas de ver a Alejandro y nuestros deseos se hicieron realidad al no verlo allí. Javier me dijo que era un aprovechado y que no se presentó. Luis, tratando de eliminar las comentarios negativos, dijo, "gente, veniros a los sofás del Nereah que son cómodos". Aceptamos encantados y además, Javier y yo decidimos echar unos combates pokémon desde el Emulador de Game Boy, concretamente del Esmeralda. Luis hacía de comentarista y justo cuando el combate estaba más emocionante que nunca, un duelo Blaziquen contra Blaziquen para decidir el ganador, llamó Alejandro a Javier diciendo: "Hola, chúpala un poquito". Esta vez no me callé y le dije por el contestador: "gilipollas, me vas a chupar la polla mientras la cago". Está claro que me metí donde no debían, pero no me iba a quedar callado cuando querían aprovechar de mi amigo.
Al rato llamó Alejandro a mi móvil y me dijo: "¿qué pasa contigo, haber si voy a tener que darte una ostia?", yo solté: "Pues pasa que eres un acoplado y un aprovechado, que te juntas con la gente cuando te interesa". Jade vio que podría haber bronca, así que cogió mi móvil y lo colgó.
Minutos más tarde, Alejandro le mandó un mensaje a Javier: "que sepas que era mi primo quien te dijo que me chuparas y a Sergio le voy a partir la cara". Luis y Javier me dijeron que no tendría que haber dicho eso y que tendría que llamarlo y disculpándome diciendo que era una broma. La verdad es que me había metido en un lío y les dije: "voy a llamarlo, no me voy a asustar por lo que diga".
Cogí el móvil, me respondió a la llamada y le respondí: "me gustaría aclarar contigo lo sucedido".