Jade se sorprendió al verme, así que le conté que no aguantaba en el piso y decidí dar una vuelta hasta que volviera del cine. Posteriormente me presentó a sus compañeros de la facultad y nos echamos unas risas jugando en el parque. Esa hora en el parque me permitió olvidarme de los problemas que tenía en el piso por unos momentos, por tanto, esa noche dormí como un bebe abrazado a Jade.
Sin embargo, al día siguiente todo cambió, ya que Jade empezó a decirme que algunos compañeros suyos empezaban a hablar a su espalda y entre ellos por el whatsapp y que intuía que ocurriría algo malo. Como muchas otras veces, su intuición se convirtió en realidad y en primer lugar, decían que sobraba en un grupo por ser de magisterio y por ello, me salí para evitar problemas, pero posteriormente una de las chicas cuyo nombre no recuerdo dijo a Jade que no encajaba en el grupo o al menos esa fue su sensación.
Ella, harta de todo, es decir, decepción con Vanessa, suspensos en la universidad y cuando parecía que había encontrado apoyo humano (sin contarme a mi) y ahora parecía que no la querían, empezó a llorar y no paró hasta pasadas dos horas. Recuerdo que me obligaba a que me fuera a clase, pero yo me quedé para consolarla. Como ambos estábamos desanimados, decidimos tomarnos el jueves libre e irnos a Puertollano para ir al cumpleaños de Ainara.
Allí estuvieron Bedardo, Armando, Javier y Jaime. Justo cuando llegué a la puerta de la casa de mi prima, Jade me dijo que finalmente no iría porque se mareó y su tía le obligó a quedarse en casa. Pensaba que la quedada sería un poco más aburrida porque mi chica no iría, pero Jaime se encargó de que la merienda fuera divertida empezando a fingir ser mi pareja diciéndonos "cariño" o dándonos caricias. Los colegas observaron que había demasiado buen rollo entre nosotros, así que nos prometieron invitarnos a chupitos si nos dábamos un beso en la boca. Nos lo pensamos y cuando Armando nos vio dudar, dijo: "no hay huevos". En ese momento, Jaime se lanzó hacia mí y dijo: "ven aquí" y me dio un beso en la boca.
Justo cuando me estaba dando el beso, aparecieron mis tíos en el salón con la boca abierta al haber presenciado el momento. Para eliminar el silencio, Jaime dijo que besaba mejor que su última ex novia y posteriormente confesó que a sus 15 años perdió la virginidad con un hombre.
Javier salió corriendo y se fue solo al pub "El Zafiro" para echar lo futbolines. Entonces decidí ir detrás de él para saber porque se alejaba de esa manera, a lo que él me dijo que porqué hizo eso, sabiendo que había estado con chicos y yo le respondí que era un beso para hacer la gracia. Tras unos minutos de silencio, nos reunimos en el pub y Ainara me dijo que Jade se podía enfadar por haberme dado ese beso, pero Jaime dijo que eso no suponía ningún problema porque le pedí permiso para realizar semejante acción y además, le mandó una nota de voz diciendo en broma: "Jade, a tu novio le voy a dejar el culo como la bandera de Japón". Tras ese mensaje, se acabó de hablar del beso.
En ese momento, la quedada empezó a ser aburrida, así que empecé a recordar mis problemas con Josué y Bedardo me notó preocupado, así que me preguntó que me ocurría. Decidí desahogarme y le conté lo sucedido entre Jade y Vanessa, a lo que él me dijo que éramos compañeros de piso y amigo, que esa amistad no debía terminar por problemas entre nuestras novias y que hablaría con él para saber su versión de los hechos esa misma noche cuando jugaran al Lol.
El apoyo de Bedardo me tranquilizó y confié en que una conversación entre ellos ayudara a que nuestra amistad volviera a ser buena. Pero si yo estaba esperanzado en que todo fuera mejor, Javier y Armando no estaban igual que yo, ya que por una parte, el primero de ellos perdió bastante dinero en el Sportium.
Ese hecho me motivó a irme a hablar con Jade, pero lo que no supe es que en esos 10 minutos de trayecto entre el casino y mi casa ocurrieran cosas que cambiaran la historia de mi pandilla- En primer lugar, Ainara decidió dejar definitivamente cuando Armando porque se hartó de sus celos enfermizos al decirle a mi prima: "osea, abrazas a tu madre y a mi no" y delante de mis tíos. En segundo lugar, justo cuando me quité la ropa y me tumbé en la cama, apareció el siguiente mensaje de Josué en nuestro grupo: "8 y media fleming": "creo que molesto en el grupo y no soy bien recibido" y salió del mismo.