Al día siguiente, a Thomas le
llegó un aviso urgente. Le instaban a reunirse en la sala de
interrogatorios donde se encontraba un supuesto testigo del
asesinato. Thomas
llegó a la sala de
interrogatorios
tan rápido como le fue posible. Dentro había un muchacho joven, el
cual se mostraba nervioso, pero decidido a contarlo todo.
El
muchacho dijo que estaba caminando tranquilamente por la calle cuando
observo al general Fritz.
Al verlo de uniforme pensó que podía
robarle algo de dinero, ya que este muchacho no tenía mucho poder
económico. Lo siguió durante un rato esperando al momento oportuno
y
vio que
un hombre salió de las sombras y atacó ferozmente a Fritz.
El
muchacho dijo que se había dado cuenta de que lo había visto e
intentó correr tras él, pero el muchacho corrió mas rápido y
logró escapar. Describió a este hombre como alguien que sabe
manejar armas blancas y que le impresionó la agilidad que tenia pese
a su corpulencia. En ese momento Thomas sintió un sudor frio porque
la
descripción coincidía con el sargento Wilhem.
Sin
embargo,Thomas
no tenía pruebas y sabía que si hacía una acusación tan grave a
alguien del rango de Wilhem acabaría fusila do, así
que,Thomas
decidió ir a su despacho cuando todos se hubieran ido pára
investigar más a fondo sobre este asunto. El único problema era
que todos los sargentos cerraban sus puertas con llave, por
tanto,Thomas
sólo tenía la opción de forzar la cerradura para poder pasar.
El
despacho estaba prácticamente igual que por la mañana. Entonces,
buscó
entre los cajones de su escritorio y descubrió un papel escrito con
la letra de Wilhem en la que ponía los horarios en los que se
encontraban Fritz
y
Thomas y
el camino por el que ambos caminaban mientras conversaban.
Thomas
se guardó esta prueba y se fue a su casa por otro camino no señalado
por Wilhem. Esa noche apenas pudo descansar ya que no podía quitarse
de la cabeza esa extraña sensación de haber estado con el asesino
de uno de los mejores hombres que había conocido en su estancia en
la capital
A
la mañana siguiente, Thomas se apresuró para llegar al despacho de
Wilhem, pero para su sorpresa no había nadie. Thomas se fue a su
despacho a realizar las cuestiones oportunas de ese día, pero no
podía dejar de pensar en este asunto. Todavía llevaba la hoja que
inculpaba a Wilhem. Entre esta prueba y la descripción del testigo
sabía que lo tenía contra las cuerdas.
De
pronto, alrededor de la media mañana, a Thomas le llegó un mensaje
urgente, el cual le instaba a reunirse inmediatamente en la sala de
interrogatorios del cuartel. Llegó tan rápido como sus piernas
se movieron. Al llegar a la sala, hubo un detalle que le llamó la
atención, que se encontraba Stephany, la hermana de Wilhem, en el
centro de la sala, llorando desconsolada. Al entrar en la sala, le
comunicaron que había
sido encontrado el cuerpo del
sargento Wilhem sin
vida.
Su
hermana
que había encontrado a
Wilhem muerto,
ya que fue a su casa debido a que era muy extraño que no acudiera a
trabajar. Según su hermana, ella llamó y al no recibir respuesta,
decidió usar la llave de la casa de Wilhem para ver si este se
encontraba bien. Ella dijo que lo encontró en su habitación con
un
tiro en la cabeza y en el escritorio de su habitación había una
nota, la cual recogió y entregó a Wilhem. En la nota ponía que se
había suicidado debido a que quería matar a Thomas, pero debido a
la oscuridad, se equivocó y mató a Fritch. Debido a su
remordimiento, decidió pegarse un tiro para acabar con su terrible
sufrimiento.
Ante
tanta desgracia, Thomas se
sintió culpable de la muerte de sus compañeros de trabajo porque su
avaricia por querer tener a Fritz había provocado que llegara el
rencor por parte de Wilhem, el anteponer la política antes que lo
personal por parte de Stephany. Por ello, aprovechando
que a su mujer la habían destinado como embajadora en Estados
Unidos, decidió irse con ella al otro lado del mundo para que no
fuera conocido y
así poder vivir tranquilamente con su mujer, sus hijos, teniendo
lejos la avaricia, el rencor, la ira y el odio que surgen cuando el
poder está en juego.
Espero que os haya gustado este mini relato policíaco, un saludo.