Durante dos semanas y media aproximadamente he podido disfrutar al máximo de los juegos olímpicos de verano en Río de Janeiro (Brasil), concretamente los terceros que veo en mi vida tras haber visto los de Pekín 2008 y Londres 2012.
Debo decir que he disfrutado una barbaridad en todos estos días de deporte, y no solo por el gran botín de medallas del deporte español (17 medallas, siendo 7 de oro), sino porque volví a sentir la emoción al ver una gran competición, hecho que no sentía hace 3 años cuando deje de seguir a fondo el deporte, las hazañas de deportistas como Ruth Beitia, Phelps, Bolt o Mo Farah o por la bonita inauguración basada en una publicidad para parar el calentamiento global o también se pudo interpretar como una animada clase de Ciencias Naturales.
Para la delegación española, hay que decir que realizaron unos juegos de notable gracias a que se igualaron los metales de Londres, pero hubo 7 oros, es decir, el año que más oros se hicieron, exceptuando Barcelona 92 y se superaron los diplomas respecto a 4 años porque fueron 38.
Mucha gente se queja de que fueron pocos metales, ya que trajimos a 300 y pico deportistas, siendo la 10º delegación con más representantes, pero claro, teniendo en cuenta que el programa ADO fue recortado por el gobierno y que el fútbol presente en la mayor parte de los medios de comunicación provoca que deportes mayoritarios en el programa olímpico como el atletismo y gimnasia artística sea menos representado por los españoles.
Sin embargo, el oro y el bronce de Mireia "in extremis", el oro de la madre super heroína de Maialen en piraguismo, el oro de los dobles de tenis de Rafa Nadal y Marc López, los oros de piraguismo del jovencísimo Marcus Cooper y de la pareja Saúl Craviotto y el jóven Cristian Toro, el oro en bádminton de Carolina Marín que acabó con todas las asiáticas y el oro en salto de altura de Ruth Beitia a sus 37 añitos.
Por otro lado, hubo diplomas que analizaré ya en otra entrada, pero quiero destacar los heroicos partidos de Nadal en la modalidad individual que quedó 4º tras dejar algunos partidazos, la casi final de Hortelano en los 200 metros lisos ganando a Blake con récord de España, o el 20º puesto de Jesús García Bragado a sus 46 años en los 50 km marcha en sus séptimos juegos olímpicos.
En definitiva, estas semanas cargadas de disciplinas deportivas sirvieron para renacer mi espíritu deportivo tanto de espectador como para meterme más caña en el atletismo y para poder centrar más el blog en otros deportes, y no solo en el motor.
Espero seguir analizando estos juegos con más profundidad durante la semana, un saludo.